lunes, 16 de enero de 2012

El Contrato 6


El Contrato


Parte 6


Cuando Gonzalo ya se había encaminado en dirección a su despacho, se oyò la voz de Mauro diciendo: ¡Don Gonzalo! Espere un momento, se olvida de llevarse el contrato.
Gomzalo > mire usted lo distraído que soy. No tiene importancia, lo importante es que esta firmado y con eso basta. ¡Hágame un favor Mauro¡
¿cual? Gonzalo > Vera usted, en estos momentos tengo las manos demasiado sucias, porque estuve haciendo algunas cosas antes de que llegaran ustedes. Le pido por favor, de que antes de que se marchen, me lo echen debajo de la puerta del despacho.
Mauro > No hay ningún problema, sera un placer.
Gonzalo > ¡Muchas gracias! Muy gentil de su parte.
Luego los tres nuevos inquilinos, se dieron un paseo por la casa observando detalles y planificando por donde empezar.
¡Bueno! Dijo Mauro, creo que el sábado podemos venir a comenzar con esto.
Si tu puedes, echanos una mano Joaquin .
Joaquin > ¡Por supuesto! No faltaba mas hombre.
Mauro > ¡Gracias primo! Vales un Perú.
Joaquin > Vamos, vamos, que no es para tanto.
Mauro > Que si lo vales.
Mauro > Lamentablemente en el curso de la semana, voy a estar muy atareado. Tengo que presentarme en la empresa para coordinar lo de mis funciones. Si no, comenzaría mañana mismo con esto.
Joaquin > Vamos a necesitar algunos hombres para que nos ayuden, porque aquí tenemos bastante por hacer.
Mauro > ¡claro que si! Es mas, tengo que comenzar a buscar personal de servicio, para que trabajen de manera permanente para mi.
Joaquin > De eso, ni te preocupes, que yo me encargo de conseguirlos.
Mauro > Solo quiero decirte que: me gustaría traer de Trujillo a Matilde. Ella ha trabajado con nosotros muchos años y me desagradaría perderla
a. Así que, en cuanto a lo de la cocina, ya tenemos quien se haga cargo.

Mauro > Creo que es suficiente por hoy, Si no hay mas que ver por aquí, nos podemos ir. Tenemos hasta el sábado, para pensar por donde comenzamos.

Rosalia > No se, pero a mi no me gusta nada esto.
Mauro > ¡Que! Ya comenzamos otra vez. Ya me parecía, tanto silencio en una mujer; no es nada bueno. Me podrías decir, ¿que es lo que no te gusta?
Rosalia > Vamos, vamos, en el camino hablaremos.
Mauro > Bien mujer, como tu digas.
Ya de camino a casa de Joaquin, Rosalia comento: No se porque razón, hemos firmado un contrato, con un desconocido y de una manera tan poco fo0rmal.
No sabemos: a donde vive, quien es, de donde viene y mil cosas mas. En fin, tu sabrás lo que haces. Mejor me quedo callada.
Mauro > ¡Hay mujer! No le des tanta vueltas al asunto. Me parece que todo esta en orden. Tenemos: un contrato, un poder, las llaves. No veo en donde esta el problema.
Joaquin > dejemos las cosas donde están, que bastante tenemos con lo que nos espera. Hay muchísimo trabajo, mejor concentrémonos en ello.
Mauro > Creo que tienes razón, no se hable mas y tu mujer; no hagas mas conjeturas,. Me parece que hemos hecho un buen negocio...

Continuara.


4 comentarios:

  1. Aaaagggggggg.¡Ya no puedo más! Esto me está superando...
    Bueno ahora en serio, creo que los hombres de esta historia debían hacer más caso a las mujeres y si no ya veremos...
    Un beso

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  2. podrias tener razon, pero...creo que mejor sigues leyendo, porque esto recien comienza.
    Si te esta superando, yo te sugiero que consultes con tu medico.
    Gracias por estar ahi y un beso Gata.

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  3. No sé por qué, pero algo me dice que Rosalía no va mal encaminada, será por eso de la intuición femenina, pero algo me huele mal en esta historia, y el tal Gonzalo no me inspira ninguna confianza. Veremos cómo se va desarrollando la historia.

    Amigo Pluma, nos tienes con el corazón en un puño.

    Un abrazo.

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  4. Gracias Elena, por la perseverancia y la resistencia.
    Espero no defraudar.
    El problema con ustedes las mujeres es: que van demasiado rapido.No contesto tu comentario, porque me huele a trampa y no voy a soltar prenda.
    Mil disculpas pero.......
    Gracias mil y un beso.

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